jueves, 15 de diciembre de 2016

"Rogue One" star WARS con mayúscula.



"Rogue One" no deconstruye la formula pero avanza profundamente en madurez. Estamos frente a una película que no esconde sus tristezas, sus dolores.







Hace un año salí de ver “El despertar de la fuerza” demasiado emocionado. Luego con las horas me comencé a dar cuenta que había visto un remake hecho con elegancia y cariño.
Cuando se asignó a J.J. Abrams la dirección de "Episodio VII" muchos pensaron que él tendría el valor o la patudez (depende de que tan talentoso lo encuentren y el cariño q le tengan a J.J.) de dar un paso más, de deconstruir Star Wars como lo había hecho con Star Trek y darle un tono más maduro.

Finalmente eso no paso. J.J. no se atrevió. Hizo su película usando la formula al dedillo, no variando en casi nada y, aunque no hubo decepción, si quedo la sensación de que faltaba algo y algo importante.

Ese algo lo entrega Gareth Edwards en "Rogue One"



"Rogue One" no deconstruye la formula pero avanza profundamente en madurez. Estamos frente a una película que no esconde sus tristezas, sus dolores. Desde el minuto uno vemos que los rebeldes no son un grupo de elite despojados de sus privilegios (como lo que se podría pensar de los Jedi) si no que son poblaciones enteras aplastadas por una dictadura, donde los rebeldes toman desde posiciones pasivas a extremistas y asesinatos por la causa.

La misión puede ser suicida, pero que importa, lo que importa es la rebelión la esperanza. 

Desde ese punto de vista "Rogue One" es una película con la que uno puede sentir más empatía, porque aquí no hay súper poderes, la fuerza está presente, pero como un agente motivador, que te empuja y guía, algo medio religioso, incluso Budista,  pero que deja atrás esa onda media mágica (aunque para muchos religión y magia es lo mismo), y también deja de ser midi-chlorians

Aquí vemos al grupo de Rebeldes que tienen como líder a Cassian Andor (Diego Luna) un capitán rebelde que no tendrá miedo de matar si es necesario, quien Junto a Jyn Erso (Felicity Jones) deben encontrar a su padre Galen Erso (Mads Mikkelsen, como siempre magnifico, cuan desperdiciado esta en Dr. Strange) el ingeniero diseñador de la estrella de la muerte. Aunque el conflicto familiar no es tan marcado como en la trilogía original o en "EVII", algo de eso hay. Luego se unen a ellos un grupo de rebeldes, con los que finalmente llevan a cabo su misión.

Gareth Edwards se la juega y se enfoca más por Wars que por el Star y eso queda perfecto. "Rogue One" recoge mucho de la tradición del cine bélico y en algunas partes puede recordar a "Saving Private Ryan" o incluso a "Apoclipsy Now" debido al lugar donde se desarrolla la batalla del tercer acto. Un planeta donde abundan las playas y palmeras. También uno puede ver en el grupo de rebeldes una reminiscencia a "Los 7 magníficos" (la de 1960 eso sí) por ende a "Los 7 Samuráis". 

"Rogue One" tiene sus cameos, también toca nuestra nostalgia, pero nunca se siente forzado. Las actuaciones están todas muy bien. El descanso humorístico que todo buen filme necesita, aquí lo pone el Androide K-2SO (Alan Tudyk) pero no porque sea chistoso, sino porque pone una actitud diferente al resto, no es un payaso, para nada, entrega sarcasmo el que es más difícil y complejo de entender que solo ser chistoso.

Para ir terminando, porque es difícil hablar mucho más sin spoiler. Existen tres escenas de las que poco he leído o escuchado que me fascinaron y que demuestra todo el espíritu Rebelde y todo el corazón de la lucha. Dos de ellas son los monólogos o discursos que en determinados puntos entregan Galen Erso y luego frente a toda la Alianza su Hija Jyn. Me dieron ganas de abrazarlos, salir corriendo tomar mi blaster y salir a golpear fuerzas imperiales. Y la otra es la aparición de algo Rojo, dorado y azul (pura nostalgia)

Si ama Star Wars tiene que verla, si no conoce nada de Star Wars ( difícil) tiene que verla igual, porque esta no es buena película de Star Wars, es por si sola una buena película.



Que la fuerza este con ustedes, sean uno con la fuerza.






martes, 29 de noviembre de 2016

Chapecoense y el triunfo final.

Hoy sucedió algo triste y horrible para los que amamos este deporte, algo que de sólo imaginar que sucediera en los clubes de los cuales somos hinchas se hace un nudo en la garganta. Hoy en algún momento del día nos hemos sentido desolados, preguntándonos porque la vida puede ser tan injusta y castigar a los que han luchado.


¿Es el fútbol el opio del pueblo? ¿exagero Albert Camus cuando dijo "Todo cuanto sé con mayor certeza sobre la moral y las obligaciones de los hombres, se lo debo al fútbol."?

Hoy sucedió algo triste y horrible para los que amamos este deporte, algo que de sólo imaginar que sucediera en los clubes de los cuales somos hinchas se hace un nudo en la garganta. Hoy en algún momento del día nos hemos sentido desolados, preguntándonos porque la vida puede ser tan injusta y castigar a los que han luchado.

Pero así es el fútbol. Ese deporte que ha sido denostado por intelectuales, ridiculizado por algunos que creen tener una superioridad moral e intelectual. Ese deporte es el que como dijo Camus, más se parece a la vida.

En la vida como en el fútbol no siempre gana el mejor, aveces o casi siempre el que tiene más plata, o derechamente el que hace trampa, que miente, que engaña que se lanza el piscinazo para engañar al juez y esperar la tarjeta roja al rival o el penal a favor. Camus también advirtió “Pronto aprendí que la pelota nunca viene hacia uno por donde uno espera que venga. Eso me ayudó mucho en la vida, sobre todo en las grandes ciudades, donde la gente no suele ser siempre lo que se dice derecha”. 
Pero aveces en el fútbol, como en la vida. uno más pequeño se levanta para demostrar que se puede, que el esfuerzo y sacrificio dan resultados, que el dinero no lo es todo, que hay que saber aprovechar una buena llave. Aveces cuando ese pequeño esta apunto de vencer al mundo la vida de golpe nos recuerda que ella es la dueña y que el camino nunca es fácil.

Pero hay está el fútbol para demostrar que por muy duro que sea el golpe, el futbolista, el futbolero, el hincha se levanta para volver a intentar una vez más ganarle a la vida, al Mundo.

Hoy todos, sin importar el valor de la plantilla el grosor de la billetera, si lo vive en la grada o por la televisión, todos nos unimos para decir Vamos, juegue, lo damos vuelta, de atrás pica el indio, lo ganamos como sea, todos, todos somos Chapecoense, por que pase lo que pase en una oficina de los poderosos, ganamos, gano la humanidad y la decencia, ganó el respeto en el momento en que Atlético Nacional, contrario a toda ambición cedió su corona a los que fueron derrotados por la muerte pero sin querer y el último minuto, como en el fútbol vencieron al egoísmo del mundo.

lunes, 28 de noviembre de 2016

Dr. Strange. Te quiero mucho, poquito, nada, te quiero mucho, poquito...


Lo primero que quiero aclarar es que no es una mala película y mucho menos es la peor película de Marvel Studios, pero bueno, tiene algunos peros.Partamos por lo bueno.






Hace rato que no me pasaba algo así con una película, fuese del género que fuera, cambie de opinión si era buena, mala o mediocre casi cada 25 minutos. Amé algunos momentos, me vi reflejados en otros, me sobrepaso a veces y por largos pasajes la encontré derechamente sobre producida. Dicen que menos es más y aquí al parecer siempre es más y más y más pero llega a un menos final.

Fui a ver Dr. Strange dos semanas luego del estreno porque no quería que la emoción me nublara el criterio. Funciono.

Lo primero que quiero aclarar es que no es una mala película y mucho menos es la peor película de Marvel Studios, pero bueno, tiene algunos peros.

Partamos por lo bueno.

Benedict Cumberbatch: Al igual que al ver Civil War sentimos que el Spiderman de Tom Holland era el definitivo, al Ver Dr. Strange uno siente que Cumberbatch cumple con creces. 

En el primer acto de la película, que para mí es lejos es el mejor, podemos ver todo el registro actoral de Cumberbatch. Esta el ego desbordante, el cinismo, la rabia, la desesperanza y la depresión, incluso las notas de comedia que aportan y que en esa etapa del personaje dentro de la película están bien. Benedict se mueve con soltura por todas esas emociones y es absolutamente creíble. Es verdad que hay muchas similitudes con Iron Man I, como historia de inicio, pero es el mismo Cumberbatch y su trabajo el que logra hacer la diferencia entre una obra y otra. Mientras el cínico Tony Stark de Robert Downey Jr. Se veía desesperado por encontrase fuera de lugar, el cínico Dr. Stephen Strange de Cumberbatch se ve desesperado porque lisa y llanamente se encuentra deprimido por la perdida.


El origen del Dr. Es casi idéntico al del comic. El diseño de la dimensión oscura es perfecto, es más, todo el diseño de los efectos visuales es hermoso y un paso adelante de lo que Marvel Studios nos tiene acostumbrados. 

Y aquí tenemos el primer empate entre lo bueno y lo malo. Como digo, el diseño de los efectos visuales es soberbio y hermoso,de hecho esta tomado casi literalmente y como homenaje a los dibujos de Steve Ditko, pero en algunos momentos es demasiado. (Tanto así que el cameo de Stand Lee es mínimo) pero volvamos a lo bueno.

Vemos a Rachel McAdams interpretar a la cirujana Christine Palmer. Palmer era una de las enfermeras de la serie de cómics Night Nurse, una colección de cuatro tomos que lanzó Marvel entre 1972 y 1973. Comento esto por que como siempre y pensando en los fans más duros del comic, tiene una cantidad muy buena e interesante de Easter eggs que el público siempre sabe agradecer.



Bueno. Ahora los peros.

Como siempre en estos casos, probablemente el mayor pero se deba a las expectativas desmedidas que se generan.

Dr. Strange debía ser la película de Marvel diferente, adulta (no porque la magía sea central debe ser infantil). Si es verdad que Ant-Man es la comedia, Guardians of de Galaxy la space opera y Civil War el thriller, Dr. Strange nos debía traer la profundidad, y no lo hace. Lo que para mí es peor, es que la insinúa muy bien (debates sobre la vida y la muerte y la responsabilidad individual en el ámbito común, ética) pero se diluye rápidamente entre el festival de efectos visuales.

Es verdad que introduce la magia al MCU, pero muy poco se demora el egocéntrico Dr. Stephen Strange en transformarse en el hechicero supremo (aunque cerca del final se nos insinúa que la transformación no está completa)

No siendo una mala película cae en los mismos errores de casi todas las películas del MCU. Un villano plano que desperdicia el talento de un gran actor como Mads Mikkelsen y una cantidad de gags innecesarios para una película que suponíamos dejaría atrás el humor básico para profundizar en los temas que no hemos visto en el MCU.

Me detengo aquí nuevamente. Una de las escenas que más me gusto fue la de la Biblioteca. Trabajo en una, estudie para ser bibliotecólogo y estoy gordo como Wong. El primer encuentro de Stranger con Wong estuvo muy bien logrado, me reí, me gusto, fue bueno, pero ¿era necesario seguir con el chiste de los nombres una segunda vez? Ya sabíamos gracias a Mordo y la clave de wifi (Easter eggs) que no son salvajes pero, ¿era necesario que Wong escuchara Beyonce? 

Con que cara los fans del MCU lo vamos a defender ahora ante la crítica del humor “Disney”.

Otra más. Cuando vi por primera vez a Strange frente a la Capa de levitación me salió un poco el fanboy y mucho más cuando comencé a ver que la capa funcionaba bien. Pero, y aquí vamos otra vez ¿era necesario convertir la mítica capa de levitación de Dr. Strange en la alfombra mágica de Aladino? 

Es curioso como Marvel Studios toma directos diversos para que finalmente terminen haciendo lo mismo con unas leves modificaciones. Cuando se supo que dirigiría Scott Derrickson (director de "El exorcismo de Emily Rose y Líbranos del mal entre otras películas de terror) se pensaba que le película tendría la oscuridad o profundidad que le faltan al MCU pero finalmente no. Es una Película Marvel Studios, en otras palabras no es mala pero ya no aporta mucho más.

Al parecer y aunque muchos les moleste el asunto, la profundidad en el universo cinematográfico de Mavel la seguirá entregando el Capitán América y las series de Netflix.

Ya. Me estoy dando vueltas en lo mismo así que vamos a resumir.

¿Es una mala película? NO. Tiene un guion aceptable que cierra bien, muy buenos efectos visuales y actuaciones convincentes.

¿Errores? Los de siempre. Villano plano, Banda de sonido inexistente, y humor exagerado que aquí sobra (tiene buenos chistes, pero también una cantidad excesiva)

Concluyo con una analogía del futbol. Dr. Strange es como Messi jugando por la selección Argentina. Uno sabe que la magia está ahí, insinúa, pero no termina por aparecer.




























martes, 8 de noviembre de 2016

Hipster Spock


Corrieron por toda la ciudad. Después de un día y una noche aún no sabían, o no se daban cuenta, o no querían saber, contra que luchaban.
Vieron una tenue luz azulada en un local que parecía estar escondido entre las galerías del centro.
Corrieron un poco más tranquilos por la protección que les brindaban los primeros rayos solares de la mañana.
Al entrar en la tienda se dieron cuenta que no había nada de lo que la gente considera importante, pero a la vez estaba todo el conocimiento que muchos consideran inútil.
El lugar era enorme, mucho más de lo que la entada delataba. Las paredes laterales y la del fondo estaban cubiertas de libros, comics, novelas gráficas y películas además de una escalera móvil en cada una de ellas ya que tendrían a lo menos 5 metros de altura. Se notaba que el segundo piso había sido eliminado para darle más altura. También habían otras tres estanterías  más pequeñas entra las paredes, detrás de estas dos sillones que se veían bastante cómodos y una mesa redonda con seis sillas. Entre los sillones y detrás de la mesa un pequeño mesón con un computador, una silla bastante extraña y un timbre junto a un letrero pequeño que decía “Prestamos. Toque solo si es estrictamente para pedir algo” detrás del mesón se dieron cuenta que había un agujero que se dirigía a un subterráneo.
La sorpresa ya era mayúscula. Tuvieron toda la sensación de haber entrado a una especie de TARDIS, pero además no era una tienda, sino una biblioteca, una que estaba entre cafés con piernas y tiendas de carcasas para celulares, pero que además no era cualquier biblioteca, era una que parecía abarcar toda la cultura pop del mundo.
Dudaron por unos minutos sí tocar o no el timbre. El mensaje decía que era estrictamente para pedir algo y ellos no lo harían, es más ni siquiera sabían si podían hacerlo. Pero si era una biblioteca, había conocimiento y eso era lo que ellos necesitaban, saber, entender, conocer que estaba pasando en esta ciudad contaminada de algo o nada. Tocaron y esperaron.
A los pocos segundos apareció. Subió del agujero como levitando. Tendría entre 35 a 38 años. Era alto, media fácilmente más de un metro ochenta, tenía una barba prominente pero no de leñador, su pelo negro azabache era  largo y parecía preocuparse de que le cubriera las orejas pero no los ojos ya que lo tenía cortado con un flequillos que le cubría la mitad de la frente, su nariz, aunque no aguileña era grandey estaba coronada por unos anteojos de marco grueso y negro. Vestía una polera azul petróleo muy oscura que le hacían notar una pansa naciente, sus pantalones eran de tela grises y ajustados y llevaba las clásicas converse all stars negras. Miro fijamente levantando una ceja y pregunto -¿Qué desean?- Ante el mutismo del grupo se dejó caer sobre su extraña silla, la que por fin reconocieron como la silla del capitán del USS Enterprise, y volvió a hablar en un tono muy flemático.
 Es ilógico que vengan hasta aquí, toquen el timbre y no pregunten nada.
Bueno de todas maneras yo ya me iba. –

Metió la mano bajo el mesón, saco un bolso de cuero café oscuro y se lo cruzo sobre su hombro. De un cajón saco una Tablet y la puso en el bolsillo principal de aquel bolso. Notaron que en el tirante que ahora  le quedaba sobre el hombro izquierdo llevaba clavado una insignia de oficial científico de Star Trek. 
Cada día y en cada lugar la situación se volvía un poco más bizarra, ahora habían encontrado un Hípster Spock

jueves, 1 de septiembre de 2016

Star trek Beyond: Más allá pero más acá en el corazón trekkie.

Le tomo tres películas a Chris Pine entender que él no tenía que imitar a William Shatner, el devia meterse en la piel de James T. Kirk y en Beyond lo logra.


Lo primero que debo decir es que voy hacer todo lo posible para hablar desde la imparcialidad. Va ser difícil como trekkie, fans confeso de Star trek, no ser extremadamente generoso con “Beyond” o por el contario, como un padre que suele ser más riguroso con sus hijos que con niños ajenos, puede que inconscientemente tenga la tendencia a ser más crítico con esta entrega. Espero no caer en ninguna.
La película parte muy, pero muy bien mostrando un Kirk y un Spock conflictuados con sus responsabilidades.
 La vida a bordo del Enterpraise se ha hecho monótona, “episódica” ,primer easter egg de Beyond al hacer referencia al carácter episódico de casi todas las series de ST (con excepción de Deep Space 9 y Enterprise que tienen arcos argumentales más largos) la tripulación está a mitad de su viaje de cinco años, de echo llevan 966 días en el espacio (otro huevo de la serie original que se estrenó el 8 de septiembre de 1966 09/66) y por tal razón hacen una parada en la nueva y flamante estación espacial Georgetown, una obra maestra de la “ingeniería espacial”(ok de los artistas de efectos especiales) que deja muy disminuida a la Elysium.
Luego una extraña alienígena pide ayuda y la Comodoro Paris (¿voy a poner todos los easter egg???) envía a Kirk y al Enterprise en su rescate.
          Esa es la premisa central de Star Trek Beyond. Vamos por lo bueno.
Beyond es un filme entretenido, rápido, pero que se da sus momentos para el respiro y algo de relativa profundidad.
La tripulación del Enterprise se ve dividida en parejas y esto da algunas de las mejores interacciones que hemos visto entre los personajes.
Kirk, que parte dubitativo en su labor de capitán se ve obligado por las circunstancias a ser el verdadero líder de su tripulación. Es curioso que esto le sucede cuando pierde a la misma y por tal razón uno empatiza con él. Todos alguna vez hemos escuchado que uno valora las cosas cundo las pierde, bueno eso es lo que le pasa a James T.
Le tomo tres películas a Chris Pine entender que él no tenía que imitar a William Shatner, el devia meterse en la piel de James T. Kirk y en Beyond lo logra.
Checov es la juventud. Se le ve interactuar con cuanta alienígena vemos en la película al parecer dispuesto a todo (ustedes entienden) puede que esto no sea así, pero es difícil dejar de pensar en lo joven y decidido que se ve al recordar que Anton Yelchin ya no está.
John Cho como Sulu demuestra que la polémica en torno a la sexualidad del personaje fue innecesaria porque el detalle es muy sutil y el saber que tiene familia sin importar la condición de esta le suma. Además en el personaje de Sulu se comienzan a notar los rasgos, que si la línea de tiempo o universo Kelvin sigue la lógica del prime, lo llevaran a convertirse en el capitán del USS Excélsior.
Zoe Saldana, al igual que lo hiciera Nichelle Nichols en los sesentas, demuestra que la Teniente Uhura no es un decorado en el Enterprise y Aquí pega sus buenos combos.
Simon Pegg nos entrega un Montgomery Scott de lujo, muy Scotty y que entabla una relación muy de mentor con la nueva adquisición del equipo, la Jaylah de Sofía Boutella.
Creo que las interacciones que se dan entre Spock (Zachary Quinto) y Bones (Karl Urban) son de lo mejor de la película, de echo ellos llevan todo el factor emocional y gran parte o por lo menos el mejor descanso humorístico. Ojo con la escena en que Spock le da risa, para mí a la altura del mítico “computer, Hello computer” de James Doohan en Star Trek Voyage home.
Karl Urban es otro que dejo de imitar a Deforest Kelley para pasar a interpretar al Dr. Leonar “Bones” Mccoy.
Todo en el me recordó a Mccoy, su expresión facial, sus chistes su collar y su “Damn it, Jim”
Spock, quienes muchos han dicho que es un Spock más emocional, se parece en algo al Spock que vimos en TOS en el capítulo “The side of Paradise”, donde afectado por una esporos muestra su lado humano y se ríe, canta y se enamora.
Porque digo esto último, porque si hay algo que se le puede criticar a Beyond es que deja muy rápido atrás los conflictos internos de los personajes que vimos en los primeros 15 minutos para transformarse en un capitulo larga duración de TOS.
¿Es eso bueno o malo? Cada uno lo debe juzgar. Alguna vez conversando en uno reunión trekkie, una amiga me dijo que para ella las mejores películas de Star Trek eran las que aportaban algo al Canon, que las demás eran episodios de larga duración, y este es una de esas.
Eso sí, es uno de los mejores episodios y al contrario de la entrega anterior, es Star Trek. Incluso la resolución del conflicto paso por un asunto de “ingeniería” de conocimientos científico técnicos aplicados para solucionar un problema. Yo vi método científico, (quizá de experimento escolar, pero ciencia al fin y al cabo)  yo vi Star Trek.
¿Tiene cosas malas? Si, Como casi todas las películas.
El promedio de duración de una película hoy es de 135 a 150 minutos y a Beyond le faltaron algunos minutos de metraje para cerrar mejor algunos puntos o contar de mejor manera como sus protagonistas logran superar sus conflictos internos. (Beyond tiene 120)
Lo que digo es que lo malo de Beyond no es lo que tiene si no lo que le falta.
Por ejemplo aunque el Krall de Idris Elba es un buen villano yo le hubiese dado mas minutos para hacerlo realmente un genocida despiadado y no un tipo que parece motivado solo por una venganza personal.
      Otros detalles ya tienen que ver más con los trekkies y son discusiones que tendremos entre nosotros. ¿Es la Franklin la primera nave en alcanzar el Warp 4? ¿No es la Enterprise NX-01 la primera nave en alcanzar el Warp5 ? Como dije cosas que solo le importan a los Trekkies como yo. (En trekcore ya aclararon el asunto http://trekcore.com/blog/2016/07/heres-where-the-franklin-fits-in-the-star-trek-timeline/ )


Quizás lo peor es que debimos espera un mes y medio para verla luego de su estreno en USA. Muchas cosas ya se sabían lo que mato las sorpresas (como la de cierta foto que aparece) y eso no es culpa de Justin Lin, JJ, ni Simon Pegg

Mi reflexión final: Una película que cumple con todo lo que un buen blockbuster debe tener. Divierte, emociona, empatizas y terminas pidiendo más, no es perfecta pero vale la pena pagar el precio de las entradas, pasaras un muy buen momento y además en el clima deprimente del día de hoy, una película que te diga que la “unión hace la fuerza” y que “siempre debes volver por tu tripulación” es casi una película Utópica, tan utópica como la sociedad que imagino Gene Roddenberry en los años sesenta. En resumen Star Trek.


sábado, 4 de junio de 2016

Adiós campeón.






“Odié cada minuto de entrenamiento, pero no paraba de repetirme: ‘No renuncies, sufre ahora y vive el resto de tu vida como un campeón”.



Que sean sus propias palabras las que definan al que fue el mayor deportista del siglo XX. Dentro y fuera del Ring de boxeo. Un hombre en el más amplio espectro de la palabra.

Adiós campeón. Adiós Muhammad Ali.



  1. “Odié cada minuto de entrenamiento, pero no paraba de repetirme: ‘No renuncies, sufre ahora y vive el resto de tu vida como un campeón”.
  2. “Imposible es solo una palabra que utilizan los débiles que encuentran más fácil vivir en el mundo que les han dado que explorar el poder que tienen para cambiarlo. Imposible no es un hecho. Es una opinión. Imposible no es una declaración. Es un desafío. Imposible es potencial. Imposible es temporal. Nada es imposible”.
  3. “Soy el más grande. Me lo dije incluso a mí mismo cuando no sabía que lo era”.
  4. “Un hombre que ve el mundo a los 50 igual que a los 20 ha perdido 30 años de vida”.
  5. “Yo no divido al mundo entre hombres modestos y arrogantes. Divido al mundo entre los hombres que mienten y los que dicen la verdad”.
  6. "Classius Clay es el nombre de un esclavo. No lo escogí. No lo quería. Yo soy Mohammad Ali, un hombre libre".
  7. "Sólo un hombre que sabe lo que se siente al ser derrotado puede llegar hasta el fondo de su alma y sacar lo que le queda de energía para ganar un combate que está igualado"
  8. "Yo sé a dónde voy y sé la verdad. Y no tiene por qué ser lo que tú quieres que sea. Soy libre de ser lo que quiero"
  9. "Servir a otros es el alquiler que se debe pagar por una habitación en la Tierra".
  10. "Cuando tienes razón, nadie lo recuerda; cuando estás equivocado, nadie lo olvida".
  11. "No cuentes los días: consigue que los días cuenten"
  12. "El silencio es oro cuando no se puede encontrar una buena respuesta".
  13. “Esta es la leyenda de Mohamed Ali. Tiene izquierda. Tiene derecha. Si te pega una vez, duermes toda la noche”.
  14. “Cuando eres tan grandioso como yo, es difícil ser humilde”
  15. “Los campeones no se hacen en gimnasios. Están hechos de algo inmaterial que está muy dentro de ellos. Es un sueño, un deseo, una visión”
  16. “Flotar como una mariposa, picar como una abeja. Tus manos no le pueden pegar a lo que tus ojos no ven”.
  17. “Soy un sabio del boxeo, un científico del boxeo. Soy un maestro del baile, un verdadero artista del ring”.
  18. “Soy tan rápido que cuando apago la luz me meto en la cama antes de que todo el cuarto esté a oscuras”
  19. “Cassius Clay es el nombre de un esclavo. No lo escogí, no lo quería. Yo soy Muhammad Alí, un hombre libre”
  20. “Yo fui el Elvis del boxeo, el Tarzán del boxeo, el Superman del boxeo, el Drácula del boxeo, el gran mito del boxeo”.
  21. “El otro día luché contra un cocodrilo, peleé contra una ballena, he esposado relámpagos, he encerrado en la cárcel a truenos, yo asesiné a una roca, he herido a una piedra, hospitalizé a un ladrillo, soy tan malo que hago enfermar a la medicina”.




sábado, 28 de mayo de 2016

Fuguet. El eterno adolescente soy yo.

Hoy por hoy leer Fuguet es también sinónimo de salir del closet. Como si por ser un hombre heterosexual estuviera prohibido leer autores gay, o peor, derechamente mujeres. ¿Porque no pasa lo mismo con Lemebel? Si voy leyendo a Lemebel en el metro es muy probable que no gane ninguna mirada acusadora, pero tampoco me voy a ganar miradas cómplices o coquetas. Si voy leyendo “Sudor” de cada 10 miradas que me llevo 5 son de vergüenza ajena, 2 de asco, 2 de rabia y la restante es una mirada coquetona y, seamos honestos, ego es ego. No me importa de quien viene la mirada. Yo sé quién soy, y el ego igual sube como la espuma.



Primer encuentro.

Abril 1993.

       Corrían los primeros meses de 1993.  Partía mi aventura en la enseñanza media en el primero “B” del colegio Exclesior de Santiago (siempre fui en el Excelsior así que no es la gran cosa). Los dos años anteriores me los había pasado tratando de cambiar, mejor dicho de esconder, mi apariencia Nerd.  Fracase.
       
          Estaba totalmente decidido a que mi paso por la enseñanza media fuera más cercano a Zack Morris que a Screech los personajes de Saved by the bell. Sin pensarlo me convertí en otra cosa, como diría Cantinflas no fui "ni lo uno ni lo otro, sino todo lo contrario".
    
        Me transforme en un animal de biblioteca. Pasaba la mayor parte de mi tiempo leyendo, durmiendo, soñando, escondiéndome de las clases de educación física, realmente escondiéndome de todo.

             Fue en ese contexto y casualmente que leí a Fuguet por primera vez.
     
        Antes de ese punto solo había leído la lectura obligatoria, Papelucho, muchos comic y todo, o casi todo, Julio Verne. También llevaba un tiempo leyendo diariamente La Tercera y Las ultimas noticias (muy distintas a lo que son hoy) y en especial y con una devoción que rayaba en lo religioso, un suplemento que salía los viernes en el Mercurio; La zona de contacto.
      
      Alejandro Lira. Profesor de historia devenido en bibliotecario me recomendó que leyera una antología de cuentos que estaba recién llegada. Su titulo Cuentos con Walkman.

          Uno de los antólogos era un tal Alejandro Fuguet. Los cuentos estaban sacados de la Zona de contacto y muchos de los que firmaban eran  participantes de los talleres literarios que el suplemento realizo.
        
           Éxtasis.

        En tres días ya había leído cuentos… y cargaba en mi mochila la novela “Mala  Onda” y otro libro de cuentos de Fuguet, “Sobredosis”.

         Uno de los mejores personajes de Mala Onda, es el “gran Alejandro Paz de Chile”. ¿Porqué creo que es uno de los mejores? Bueno uno de mis mejores amigos de ese entonces y hasta el día de hoy es Eugenio Ariel Paz y, como es lógico, para mí se transformó casi inmediatamente en el “Gran Ariel Paz de Chile”.

          Lo de sobredosis es tragicómico. Hace una año más o menos en un posteo en Facebook en el que recordaba los noventas y a Fuguet, un ex compañero de la enseñanza media, que hoy alcanza el éxito como profesor titular de letras en la PUC, comento que fue acusado del robo de una de las copias de Sobredosis de la Biblioteca del Excelsior. Lo confesé ese día y lo vuelvo hacer hoy. Yo tengo dicha copia. Se la preste a mi hija mayor. La leyó. No pienso devolverla. La multa debe ser muy alta.

Segundo encuentro.

1996 o 97. No recuerdo el mes.

           Ya no tenía acceso a la biblioteca del escolar. Había leído toda la obra de Fuguet, que para ese entonces no era muy amplia. Me vi obligado a comprar “Tinta Roja” fue el primer libro que compre con mi propio dinero.

          Solo recuerdo que era otoño pero hacia un frío de invierno. Fuguet iría a firmar su obra a Maipú (es posible). El lugar elegido no era la Biblioteca municipal, algún colegio, o la casa de la cultura. No. Las firmas las iba hacer en el Blockbuster de pajaritos ( hoy me parece tan obvio). Paradero 21 y medio a dos cuadras de la plaza, la pileta y su árbol de más de 200 años.

            Llegue antes porque pensé que él podía llegar temprano. La verdad es que llegue adelantado porque justo a la hora que Fuguet iba a estar firmando me tenía que juntar con Carla (Algunos nombres han sido cambiado para proteger la identidad de los verdaderos protagonistas), quien por aquel entonces era el objeto de todos mis afectos. 

         Le deje mi copia de Tinta roja a la jefa de local del Blockbuster, la que por cierto pude haber convertido también el objeto de mi afecto. Al día siguiente fui a buscar mi libro firmado.

             Nunca voy a saber si Fuguet firmo ese libro, o si lo hizo algún jovencito de no más de veinte años que creía que por trabajar en un vídeo club terminaría convertido en productor, director o guionista de sus propias películas. ¿Dónde leí algo así?

            Ahora, si Fuguet realmente firmo ese libro, nunca sabré como fue nuestro encuentro. Le habré dicho – hola he leído todo lo que has escrito- o me quede mudo sin decir palabra. Quizá le hubiese pasado una hoja con uno de los cuentos que por ese entonces escribía (cuentos que eran tan o más malos que las miserables entradas de este blog tardío) él lo hubiese leído. Se hubiese enamorado de mi inocencia y mi look que por ese entonces era “Britpop” pero de la clase más obrera de Manchester. Yo no lo hubiese correspondido, y me odiaría y ahora yo sería Renzo.  Quizás me hubiese mirado asqueado y yo habría pensado "que se cree este roto tirado a cuico" y nunca más hubiese leído un libro suyo y mucho menos visto una de sus películas. Bueno no lo sé. Solo sé, que no sé, si la firma en mi copia de Tinta Roja es suya. Nunca lo voy a saber. Perdí dicha copia.

Decepción 1.

Año 2001.

               Estudiaba periodismo en la Academia de Humanismo cristiano. Lo voy hacer fácil. El solo decir Fuguet era igual al destierro. Odio, envidia, que se yo. Por un año, mismo año que duro mi aventura en esa carrera y universidad, lo borre totalmente de mis autores (que no eran muchos), mis recuerdos, de todo. Más adelante me di cuenta que era así en casi todos lados. El intelectual lo detesta. El red set lo encuentra cuico. La crítica lo acusa de banal,  agringado, vendido, falso y mucho más.

              La verdad es que es probable que Fuguet sea todo eso y más. Pero una cosa no es; No es engrupido, y no existe nada peor que un autor que crea que su obra es más importante que la vida misma y que con su prosa va cambiar la literatura, el arte, el mundo, todo.

Decepción 2.

         Deje claro que leer Fuguet era el exilio en las universidades privadas de izquierda (si, así como lo lee. Exilio, universidades privadas e izquierda en la misma frase) ademas es acusarse de ligth, poco culto, banal. Hoy por hoy leer Fuguet es también sinónimo de salir del closet. Como si por ser un hombre heterosexual estuviera prohibido leer autores gay, o peor, derechamente mujeres. ¿Porque no pasa lo mismo con Lemebel? Si voy leyendo a Lemebel en el metro es muy probable que no gane ninguna mirada acusadora, pero tampoco me voy a ganar miradas cómplices o coquetas. Si voy leyendo “Sudor” de cada 10 miradas que me llevo 5 son de vergüenza ajena, 2 de asco, 2 de rabia y la restante es una mirada coquetona y, seamos honestos,  ego es ego. No me importa de quien viene la mirada. Yo sé quién soy y el ego igual sube como la espuma.

        Descubrí esto en una micro enana en el litoral central hace como 15 años. Con mi grupo de amigos de aquel entonces nos fuimos a Loncura a filmar un corto. Loncura es una playa asquerosa y, filmar un corto, es una frese demasiado pretenciosa.

           Le robaba unas pulseras de Acrílico muy retro para esos días a mi amiga Andy (si. Es Andy como amigo, pero es amiga) se las quitaba me las ponía y le decía casi gritando que una lesbiana no podía usar pulseras tan bonitas. La Andy no es lesbiana y yo no soy gay, pero las miradas que nos ganábamos con eso juegos ridículos llenaban el ego de atención.

          Tengo amigos que se sienten asqueados si un hombre los mira mucho. Yo no. Si alguien me ve porque me encuentra lindo, bello, atractivo deseable o incluso feo, asqueroso, cerdo, infumable, no es que no me importe, pero claramente no va cambiar la percepción que yo tengo sobre mi persona. Y no me vengan con cuentos. Es rico sentirse deseado, admirado, valorado. Te da una sensación de poder.

              Ya. Pero estoy divagando y desviándome mucho del título de la entrada.

           Leer a Fuguet es para la gran mayoría, dárselas de culto cuando solo estás leyendo cultura pop y basura (existe algo más importante que la cultura pop). En otras palabras leer a Fuguet es ser engrupido. La único de la que yo lo absuelvo.

            La cosa es que yo si me engrupí. Después de Missing (una investigación) no lo leí más. Estudiaba Bibliotecología. Como va ser posible que un culto bibliotecario lea a Fuguet. La lapida la puso Aeropuertos. No pude pasar de la página 12.


El imperio contraataca.

         En mi último semestre de técnico en bibliotecología (dejémoslo claro para que no salte el colegio de bibliotecarios) en la cátedra de literatura teníamos que hacer un ensayo y una exposición de algún autor iberoamericano. Trabajo grupal. Antes que me lo pregunten debo decir que este tipos de trabajos son los que se hacen hoy en la educación superior en Chile y claramente eso explica muchas cosas.

       Propuse Fuguet. Antes que terminara de decir Alberto ya mis compañeritos lo habían desechado. Mi profesora era una veinteañera hipster artesa recién titulada de Literatura de la Chile. Busque en ella el apoyo para enfrentar a mis compañeros pero la humillación fue peor.

         Mientras todo el grupo curso preparaba material del Vargas Llosa, Sabato, García Lorca, Rulfo etc. Autores notables por si mismos, para que seguir hablando de ellos. Yo preparaba mi contraataque. Les preste a mis compañeros, de mi colección personal, un par de libros de un tal Ray Loriga, autor que mi súper profesora de literatura ignoraba.

      En fin. En este lado del mundo es casi imposible no hablar de Loriga y terminar hablando de Fuguet. Fue la exposición más discutida. Por el desconocimiento de Loriga, por lo prejuicios de la Mayoría, por un compañerito que comparo a Loriga y Fuguet con la generación Beat pero rasca (así lo definió el) hablamos de cine, cultura pop, realismo mágico, Andrés Caicedo, escritores malditos y malditos escritores, suicidio, vida, y muchas otras cosas, tantas que puede ser que invente la mitad solo porque deseaba que fuera así.

Redención.

Mayo 2016.

          Como cada medio día al llegar a mi puesto de trabajo como asistente en la Biblioteca del campus San Joaquín de la PUC, abrí mi correo institucional. Mi reserva de “Sudor” de Alberto Fuguet ya había llegado.

          Bajé al mesón de préstamo y se lo pedí a mi colega Alondra.

          Alondra es una chica divertida pero algo extraña. Sabe de todo un poco, pero a la vez no sabe mucho de ninguna cosas. Una vez me buscaba urgente, por toda la biblioteca y el campus, para preguntarme si Star wars se dividía por capítulos, volumen o episodios. Hoy cuando me presto el libro tuvimos una pequeña conversación:

-Tienes dos préstamos vencidos…
-Sorry Alondra. Cambiales la fecha y préstame el libro.
-¿Y qué pediste?
- ….
-Así que Fuguet.
-Si. Es que – mi cara se descompuso y me entraron todas las excusas que inventen en la Academia de humanismo cristiano para justificar  que leía a Fuguet- quería leer algo livian…
-Tranquilo. No tienes que explicarme nada. Eres un chico noventero.
- ….
-Yo también lo soy.
-¿un chico o noventero? – Mi sentido del humor ridículo y torpe- te estoy leseando.
-Jajajajaja noventera po. ¿Supongo que leías la Zona?
-¿De contacto? Por supuesto. Todavía tengo algunas guardadas entre mis recuerdos.
-Mi mamá me las boto todas. Buenos recuerdos de  Fuguet. Después me cuentas como es.
                                                   -Te lo aseguro. Chica noventera.

         Me despedí y Salí con la sensación de que no estaba del todo solo. Que en los extraños o aburridos años noventa, muchos sentimos que un tipo que de seguro no quería ser la voz de una generación se había convertido en el idioma de la misma.

          Es verdad que para muchos Fuguet es un autor menor. Acusado de escribir siempre lo mismo. De repetir una y otra vez la vida de Matías Vicuña. De ser un eterno adolescente.

         Cuando bordeas los 40 te comienzas a sentir chato, vacío, incompleto. Un día quieres dejarlo todo; al rato quieres permanecer inmóvil, estático, quieto, por siempre. Sientes que vas a explotar. EL trabajo, deudas, hijos, responsabilidades, enfermedades etc. Estas cansado. Vas a colapsar. Te sube la presión, engordas, ya no te queda la ropa que amas. Cambias Zara por el líder y te compras parcas North face “alternativas” (eufemismo de pirata) en el persa.

          Pero como para todo en la vida existen dos caminos. Puedes huir y dejar todo atrás con todo lo que ese acarrea y puede o no llegar a doler. O puedes buscar válvulas de escape.

         Por eso una lee, va al cine, ve series, se subscribe a netflix, te compras ropa, sales a caminar solo por el centro, Providencia, Lastarria. Vas al GAM, al centro cultural palacio de la  Moneda. Te sientes un poco niño, adolescente, con ganas otra vez. Son válvulas, mis válvulas de escape, y aunque si leyera esto lo odiaría, Fuguet es una de mis más queridas escapatorias.

          Me conecta con la adolescencia, el colegio, los amigos. Con Paz, Opazo la Andy y muchos mas. Me saca. Me borra. Me evade. Funciona como una droga, es más, ahora que se me acabo el antidepresivo, “sudor” lo ha reemplazado muy bien.

           ¿Es tonto todo esto? Si. ¿Ridículo? Claramente. ¿Mediocre? Porque no.

          Es mi problema. Mi manera. Algunos son infieles, tiran unos con otros y otras,  fuman hierba, hacen running, etc. Yo leo Fuguet. Puede ser tonto, pero es lo que es. Fue mi adolescencia, mis fracasos y mi adultez. Ustedes pueden seguir sintiéndose más cultos. Mejores. Por mi parte yo seré feliz leyendo como que tengo 15 años.

          Ayer me llego un nuevo correo. La copia de "sudor" ha sido reservada por otro usuario. Tengo hasta el seis de junio. ¿sera otro noventero?






sábado, 14 de mayo de 2016

Como me molesta.

  

     Como me molesta la gente que critica a alguien por redes sociales, pero no tiene el valor para ponerle @ que tiran ofensas al viento sin ser capaces de decir "Es para ti". Como me molesta la gente que hace lo que estoy haciendo en este mensaje.


     Como me molestan los que publican "facebook no es para ventilar tus problemas". Yo creo que tampoco es para aburrir con mentiras sobre vidas perfectas que sabemos que no son reales. Pero yo no digo nada sobre eso (hasta hoy).


     Como me molestan los que invitan a parar el hambre en África con un like. Los que creen que la cura del cáncer esta en un post, los que no leen las noticias que comparten y alarman con crisis y secuestros que sucedieron hace dos años muy lejos de aquí. Los que no conocen a quien los representan y suben la foto de una diputada Venezolana con sus pies sobre la silla como si fuera Chilena.


     Como me molestan los que creen en "Paul Walker esta vivo y esta fue la razón para fingir su muerte" o que los Minions eran niños con los que experimentaron los Nazi o que Chespirito hizo pacto con el demonio o tantas cosas mas.


      Como me molestan los que creen que se ganaran un Jeep, una moto, una casa o cualquier otra cosa compartiendo un foto, un estado o "Dándole me gusta a mi fan page".


      Pero por sobre todas las cosas, como me molestan los que creen absolutamente en todo lo que leen en la web y, lo certifican como real, porque "Salio en Internet". Mejor seamos ciento por ciento honestos, los que creen que todo lo que ven a la rápida en internet es verdad, por que ni siquiera se dan tiempo de leer, y como no leen van a querer entender que esta entrada es la de un tipo amargado y furioso cuando solo es la divagación de un alguien que se esta divirtiendo y que muy seguramente hace en sus redes sociales las mismas cosas que le molestan de todos los demás.


       En fin siempre, peros siempre, es mas fácil ver la paja en el ojo ajeno que la biga en el propio ojo.


( ufffff como me molestan los que citan textos bíblicos como si fueran mensajes de auto ayuda jajajaja)

miércoles, 11 de mayo de 2016

Leyendo a Murakami






     Creo que me viste en el bus. La verdad no lo sé. Te hice señas. Yo viajaba solo, leyendo a Murakami. Te hice más señas. 

     Estabas con tu novio. Deje de hacerte señas porque pensé que a mí no me gustaría que me interrumpieran al estar con mi novia. Bueno ya no estoy en esa etapa y, la verdad, a veces pienso si no hubiese sido mejor que me interrumpieran, que me rescataran, que alguien dejara atrás su lectura para venir en mi auxilio. No importa si era una mujer, un hombre o un gato, pero que viniera por mí y me despertara del letargo en que se suele convertir una relación formal. 

     La cosa es que no soy un héroe, además quien soy yo para ayudarte a salir de un lugar en el que tú misma decidiste entrar. 

     Ahora que pasaron los años pienso que todo es mejor así. Tú con tu novio en un bus hablando y mirándose a los ojos como enfermos, buscando en el otro algo que solo pueden encontrar dentro de si mismos. Yo por mi parte sigo aletargado, nadie llego a mi rescate ni yo junte el valor para escaparme, y no me arrepiento, después de todo soy lo que la gente llama "Un tipo feliz" aunque creo que me sigue faltando el gato. Es por eso que deje de hacerte señas y seguí leyendo a Murakami. 

      Si debo ser honesto tampoco es que fueron grandes señas. No hubo llamados, gritos, saltos, sólo una mirada y levantar la ceja, nada muy llamativo. 

     También es verdad que no conozco a tu novio. Recordaras que me cuesta hablar con gente que no conozco, es más, me es difícil hablar con la que conozco. Aunque supongo que si es tu novio debe ser un tipo interesante. Debe ser de esos que escucha The Stone Roses que no usa redes sociales y que lee Bukowski con devoción. A mí me gusta mucho Factótum pero por ahora sigo leyendo Murakami.



     Llegó la hora de bajar. Al ponerme de pie veo que llevas una bolsa con un gran paquete envuelto en papel de regalo. Saco cuentas mentales y recuerdo que hoy es tu cumpleaños. Eso explica las miradas, las sonrisas, todo. No creo que necesites un rescate, todos sonríen mas el día de su cumpleaños y, como dije, yo no tuve el mío y aquí me tienes leyendo a Murakami.


 

martes, 10 de mayo de 2016

Civil War o la humanidad del super hombre con poco muy poco de guerra.


El Capitán América del MCU es un personaje lleno de contradicciones un fiel representante de la nación que simboliza. Los Estados Unidos son el país de la libertad pero es una nación que no teme en vigilar a sus ciudadanos cuartando las mismas. El Capitán Rogers no quiere que instituciones con agenda propia como la ONU lo supervisen, pero cuando él tiene su propia agenda (encontrar al soldado de invierno) la pone por sobre todo, incluido su propio bienestar. 


     El año pasado vi Avengers, Age of Ultron en la función de media noche del miércoles antes del estreno en Chile que a su vez fue una semana antes que en el resto de américa latina que además fue una semana antes que en Estados Unidos. Salí eufórico del cine por haber sido uno de los primeros y escribí en Facebook para luego compartir un pantallazo en Instagram que "AAOU" era, en lo que al género de acción se refiere, una de las mejores películas que había visto. La llegue a comparar con "El imperio contraataca" en su calidad de película puente. Luego de verla un par de veces más en el cine me di cuenta que me deje llevar totalmente por la emoción y que AAOU apenas aprueba y que es más una película entretenida para ver en la casa acostado cuando hace frío.
     Otra razón para esperar fue que quería que CACW se estrenara en USA y Europa (como si alguien fuera de mi muy reducido grupo de amigos fuera a leer esto). Nuevamente y por cosas de distribuidor se estrenó una semana antes en este lado del mundo, además y en mi muy pobre opinión, luego de dos semanas no hay spoiler. Finalmente lo tenía que hacer ahora para que no se me juntara con X-Men Apocalypse.
     No me voy a detener mucho en la trama del filme porque a esta altura dudo que alguien no la conozca y porque en esta película no es lo más relevante. Que la trama no sea lo importante en la segunda película del Capitán América firmada por los Russo no la hace una mala obra, muy por el contrario le enriquece. Aquí lo importante son los personajes y sus motivaciones. La o las historia son meras escusas para mostrar de que están hechos nuestros héroes, los que terminan siendo más débiles y humanos que nosotros mismos.
     Pero básicamente los vengadores persiguen a crossbones, lo atrapan pero en el intertanto Scarlet Witch para salvar la vida al Cap. genera una explosión que mata a un número mayor de civiles que mayoritariamente eran ciudadanos de Wakanda. Por esta razón los países agrupados en la ONU firman los acuerdos de sokovia, que son una manera de poner control y supervisión a los vengadores. Stark los quiere firmar, Rogers no y los demás toman partido. Mientras todo esto pasa se desarrolla otra historia que es la que mueve a los personajes.  
     CACW es una película de motivaciones no de motivos. Dan un poco lo mismo los hechos, lo importante aquí son las motivaciones de los personajes para responder a cualquiera cosa que suceda.
      Tony Stark aka Iron Man sigue teniendo las mismas motivaciones que durante todo su paso por el MCU (ya hablaremos del MCU) el ego. Aquí aparece más disfrazado de culpa, pero es el ego el gran motor de esa culpa. Stark siente que todo lo que ha pasado es su única y propia responsabilidad y los acuerdos son una manera de expiar sus miedos.
     Por otro lado el Capitán Rogers se muestra como un tipo solo. Acaba de enterrar a Sharon Carter la única conexión con su pasado a parte del Soldado de invierno. Ese pasado era una época de lealtades firmes, mismas que hoy ya no existen. El vio la traición en S.H.I.E.L.D. y a su mejor amigo ser víctima de esas traiciones al nivel de ponerlo frente a si mismo. Rogers no confía en las instituciones pero si en la gente. El capitán lleva en su uniforme las barras y las estrellas pero le da la espalda a esos símbolos para ser leal a su compañero. Para él es su gente antes que la bandera, aunque la pérdida de vidas por defender la bandera le parece un "Daño colateral".

     El Capitán América. del MCU es un personaje lleno de contradicciones un fiel representante de la nación que simboliza. Los Estados Unidos son el país de la libertad pero es una nación que no teme en vigilar a sus ciudadanos cuartando las mismas. El Capitán Rogers no quiere que instituciones con agenda propia como la ONU lo supervisen, pero cuando él tiene su propia agenda (encontrar al soldado de invierno) la pone por sobre todo, incluido su propio bienestar. 

         Los hermanos Russo construyen tan bien a sus personajes que por ejemplo, aunque no vemos nada de la historia de Spiderman, salimos del cine con la sensación de haber visto al Peter Parker definitivo. Un personaje , que empatiza con todos. Da lo mismo de donde salió, si Tony lo venía siguiendo de hace meses o no, si lo pico una araña radiactiva, si la tía May es muy joven etc. etc. etc. lo importante es que podría ser cualquiera de nosotros y por eso nos encantó. 
     

      Otro ejemplo es el Villano de turno. En este caso Helmut Zemo. Se ha dicho que los villanos que nos entrega Marvel/Disney son acartonados, básicos, tontos. Algunos pueden atribuir esto a que el muy buen Loki de Tom Hiddleston dejo la vara muy alta y que luego de eso ninguno está a su altura. Lo que hicieron los hermanos Russo y Daniel Bruhl con el personaje de Zemo se acerca un poco a ese Loki. Vemos inteligencia, rabia y odio. No es la fuerza de Zemo su arma, es su frialdad y su sed de venganza por la muerte de los suyos lo que le hacen un personaje de temer. Es verdad que el plan de Zemo nos puede parecer rebuscado pero no existe nada pueril en sus motivaciones. 
    En resumen CACW es una buena película. No creo que sea la mejor película del MCU (personalmente creo que Capitán américa el primer vengador es la mejor. cosa de gustos) pero está dentro de las mejores. Los nuevos personajes que nos presenta están súper bien logrados y le aportan peso y dinamismo al film. Ya hable de Spiderman y Black Panter está igual de espectacular. No se siente en ningún momento que estamos viendo los Vengadores 2.5, estamos ciento por ciento frente a una película del Capitán América. Como dije antes Zemo es un antagonista de temer y del que no hemos visto todo aún. Paul Rudd y su humor encajan perfecto en una película que a ratos parece sumergirse de lleno en el mundo del espionaje más que en el de los superhéroes.




¿Tiene fallas? Si, pero son fallos que tienen que ver más con la globalidad del MCU. No juega muy a favor del filme el saber que la mayoría de los personajes volverán a películas individuales o serán parte de Infinity War. Y aunque sea raro, el momento que más se disfruta en la sala de cine, el enfrentamiento entre los héroes, al analizarlo fuera de la emoción está muy lejos de ser una guerra. De eso podemos culpar a los multiversos de Marvel y a los fanboy que quieren una adaptación al pie de la letra. Y aunque ella es uno de los detonantes (literalmente) el presentar a Wanda como una niña desamparada en vez de como una de las mujeres más poderosas de la tierra también juega en contra. 
       Pero tiene muchas más cosas a su favor. Tiene respeto por sus personajes no los sumerge en pesadillas y sueños extraños como el de Thor en AAOU o Batman en BVS. No les da diálogos tan tristes como "Quien es Marta" o "soy amigo de su hijo" . Pueden decir que CACW no se la juega del todo o que no es una verdadera "Guerra civil" pero por lo menos no comete el error de tomarse más enserio de lo que realmente es y peor aún hacerlo cambiando el color por un tono sepia. Para finalizar he leído miles de comentarios en su mayoría de fanboy que critican a CACW porque no es igual al comics. Han pasado casi 10 años desde que vimos el primer Iron Man y todavía no entienden que este es otro universo Marvel, el MCU. No es el 616 ni el ultimate menos el noir, es otro, el MCU y fin del asunto. Si es mejor igual o peor esa es otra historia.